domingo, 10 de abril de 2011

Un ocho de abril



Recién hoy estoy en la comodidad de mi casa y puedo escribir en paz y la verdad recién ahora me dan ganas.

Bueno, el ocho de este mes, fui a ver a Maiden por primera vez, sí, porque ya me venía perdiendo todas las veces que venían pero ya está: puedo morir en paz.

Fui al colegio, fueron las peores horas de mi vida; se hacían enteras y no pasaban más pero al fin, me retiré un poco antes y me fui a casa a cambiar, bañar y arreglar todo.

Ah... no tengo ganas de escribir.

Me cansé, me duele la garganta y tengo hambre.

En fin: fue un concierto único y me cuesta creer que al fin los vi. Es algo... ÚNICO. Y Aarrrrrg. Eso, cuesta creerlo, que: LOS VI.

Mierda carajo.

Kamelot: suenan bien, pero la verdad que las ganas de Maiden destruían toda expectativa.