lunes, 19 de agosto de 2013

 
Estuve varios días fuera de casa. La verdad no me arrepiento de nada. 
Sinceramente, no suelo contar estas cosas pero salí con bastante dinero de casa, tenía que comprar unas cosas para mí, regalos del día del niño y además llevar un poco de plata para sobrevivir el resto del fin de semana. 
Mi día comenzó a las 8 de la mañana cuando me desperté de mal humor  porque tenía que ir a cursar, sí... soy de ese tipo de personas que dice "ya fue, son sólo dos horas un sábado" y después se quiere matar. 
Me despierto temprano, agarro mis cosas, me tomo el 98 y comienzo mi día; para mi sorpresa... cuando llego a la universidad (Después de haberme en la parada equivocada) me cruzo con unas compañeras que me dicen que NO TENEMOS CLASES, y fue un ¿CÓMO? Y si, efectivamente no teníamos clases, porque se les ocurrió hacer feriado puente, y no avisarnos. Una parte de mi se enojó un poco porque podría haberme quedado durmiendo un poco más, pero la otra dijo "vamos carajo, no tengo que hacer nada" Ahora, tenía tiempo de sobra, después tenía que buscar unas compras a Capital así que me fui a dar unas vueltas por Avellaneda con mi cámara analógica, en el transcurso se me colgó a hablar un señor mayor, diciéndome que las cámaras de rollo son las mejores, y que él tiene una Alemana de cuando era joven y ahí está, intacta y que no la cambia por ninguna de las nuevas. 
En fin, se me estaba haciendo tarde y sabía que el día era largo así que seguí mi camino hasta Capital para pagar la mini cámara que me pareció interesante. No tiene mucha vida útil. Son difíciles de conseguir los rollos y si los hay seguramente son muy caros. Pero si a alguien le interesa, me avisa y les paso el lugar donde la conseguí. 
Tomé un colectivo hasta Florida, gente por todas partes para variar y empujones por doquier, nada nuevo. Ahí fui a comprar los juegos de PS3 para mi hermano, y para mi. Mi estado financiero estaba en decadencia, pero mi niña interior bailaba sin parar. 
Ya tenía mi día casi terminado, fui hasta Villa del Parque para finalizar mi recorrido, pero aún me faltaba un juego que conseguir, hasta que bajé y caminé hasta el local. Lamentablemente, no pude evitar entrar a una Feria Americana que estaba por ahí, y creo que fue una de las mejores decisiones de mi vida... encontré unos borcegos que ahora son uno de los amores de mi vida. ¿Saben lo que los hace ser más lindos? Que me salieron $100.
Siento que fue un fin de semana hiper productivo, además... ¡Conseguí el nuevo CD de Black Sabbath! Ese fue producto del Lunes feriadesco.
Como si todo eso no fuera poco, cuando volví a casa, mi tío me regaló una cámara del día del niño, una hermosa Polaroid 430
Días productivos en mi vida, hace días que no los tenía.