lunes, 15 de diciembre de 2014


Aguante volver a tener sueños súper geniales y confusos de nuevo.
Hacía ya bastante tiempo que no los tenía pero por suerte volvieron a aparecer. Fueron varios en uno solo, aparentemente. No sé el orden, pero era algo así:

"Estaba en una mansión gigante, muy millonario todo. No recuerdo con quién estaba pero sé que eran unos idiotas y que los odiaba. Empieza a llover muy fuerte y afuera una criatura blanca que pide entrar, de alguna forma vuela y entra asustada, era una "lechuza" blanca. O por lo menos en ese momento, estaba 100% segura que lo era.
Al entrar, alguien de la mansión la agarra y saca violentamente de nuevo a la tormenta. Acá es cuando mi Instinto proteccionista animal se activa y salgo en medio de la lluvia a buscarla de nuevo; cuando la encuentro la escondo con una sábana y la entro a mi habitación, cierro la puerta la dejo ahí y me voy.
Cuando regreso a dormir, la busco y no estaba, pero en su lugar había un gato de pelo largo, bastante grande. ¿La lechuza se transformó en un gato? No sé. Hay un bache en mi sueño. Pero estaba ahí".

Fin de la 1ra del sueño.
Comienzo de la 2da parte.

"El lugar es el mismo, pero esta en esta ocasión, en vez de salvar a una "lechuza-gato" salvo a un pajarito. Que casualmente era igual al que salvé en la vida real hace unas semanas.
Estaba en mi habitación con el pajarito que por suerte muy sociable y creo que podía comunicarme con él. De pronto, en medio de la noche empiezan a aparecer... duendes, aliens, o algo así. Eran pequeños animalitos amarillos que venían a romper las bolas y se querían comer al pajarito. Al ver dicha situación, agarro al pajarito y lo pongo en un lugar más alto, pero de todas formas llegan a él a mi no sé que carajo me habían hecho pero me costaba mucho moverme. Bueno, yo ya me estaba despidiendo del pobre pajarito cuando veo que el pequeño se puede defender y empieza a rasguñarnos, picotearlos hasta deshacerse de ellos. Ahí es cuando desaparecen los animalitos esos y lo felicito. Creo que me responde".

Fin de la 2da del sueño.
Comienzo de la 3º parte.

"Cambia totalmente toda la locación, ya no estoy en una mansión sino que estoy a tres cuadras de mi casa, junto a mi amigo León. En un momento, él se acerca a un auto e intenta abrirlo, la puerta se abre y empieza a revisarlo hasta encontrar una billetera "Siempre hay un boludo que deja la puerta abierta ¿Viste?" Yo me lo quedé mirando sin entender una mierda, porque estaba casi segura que el nunca haría algo así. León, al notar mi cara de espanto me dice que no me haga problema que ahora con la plata que había en la billetera nos compramos un helado".

~Fin de los sueños.