Esto me pasa desde que tengo 12 años más o menos, a los 13 fue la primera vez que me teñí (Violeta, casualmente) y creo que desde ese entonces nunca dejé de hacerlo.
Hoy en día con mis 21 años, tampoco cambió mucho, por suerte siempre tuve trabajos que me dejaban ir como quisiera, pero me quedé sin ese trabajo ideal, y la verdad que me di cuenta que estaba en un notable aprieto; ya que nadie me tomaba por "mi estilo" si bien, puedo vestirme como gente normal y sacarme los piercings, el pelo no es muy fácil de esconder y las pelucas me encantan pero definitivamente no estoy hecha para ellas así que no me queda otra que teñirme de algún color más oscuro que el violeta.
Este cuatrimestre, no puedo trabajar porque me anoté en muchas materias con horarios horribles, pero el cuatrimestre que viene voy a tener que teñirme y buscar un empleo hasta que la Nación de la pobreza termine con lo último que queda de mí.
Ahora, tengo un pequeño desperfecto mental. Encontré una App que cambia el color de pelo en la Webcam, y recordé lo genial que era mi color castaño y lo lindo que es. Casi me tiño ahora, y porque realmente me gusta; pero después recordé que voy a tener ese color por un largo rato (Si es que sigo trabajando, bah, si es que consigo trabajo) así que desistí. Después de varios meses de pensar en esto ya dije que me voy a hacer las raíces de violeta de nuevo, al punto que la gente me pregunte en la calle si es una peluca. Y sí, sé que el pelo se daña mucho, pero confío en mi genética de pelo fuerte y sé que puede soportarlo, además van a venir meses de mucha sanidad y descanzo para él.
No molesten con sus teorías, algunas personas con pelo virgen me lo dicen, y aún así su pelo está más seco o dañado que el mío. Honestamente, no sé como lo hacen.
Si no se calló en 10 años, no se va a caer ahora.
HE DICHO.
Cabeza de berenjena strikes back.
