viernes, 6 de mayo de 2011

Teatro con olor a muerto.


Entrar al recinto donde se llevan a cabo los eventos del colegio y darse cuenta que hay un importante olor a muerto. No de muerto recién muerto o que sólo pasaron un par de semanas, sino del muerto que lleva años dentro de un lugar, que no tiene más olor a putrefacción y adopta un olor a vejez.
Es como el olor que se siente al entrar a un departamento antiguo de la Cuidad de Buenos Aires, de esos en los que viven señoras viejas, solas, que quedaron viudas y tienen una foto de su marido sentado tétricamente en una silla elegante, de esas señoras que tienen perritos pequeños que se les puede ver la aurora de maldad, o tiene gatos que parecen sacados de un culto satánico. A ese olor a muerto me refiero.

Amaría que ningún directivo esté leyendo esto.
Pero sólo quiero decir una cosa no más, espero que fanáticos religiosos no se ofendan al leer esto, repito: amaría que ningún directivo lea esto. (aunque al fin del cabo es mi blog, y estoy fuera del colegio, y no tengo puesto el uniforme, así que...)

Bueno. Ya que en teatro de mi colegio hay olor a muerto.
Saqué una pequeña teoría, que a algunos les puede parecer algo sádica.

¿Saben por qué es el olor a muerto? - creo que está más que claro. El olor a muerto proviene de todas las monjas que fueron muriendo y fueron escondidas entre las butacas del Teatro. Es obvio, y tiene demasiado sentido, las pobres mujeres no tenían ni familia, ni amigos. Sólo a Jesús y a los demás, así que que mejor idea de ahorrarse el servicio funerario que esconderlas "amablemente" en el colegio donde pasaron la mayor parte de su vida. Sino es que toda...

Sí señores. Otro misterio resuelto por mí. Descubrí el olor a muerto del Teatro, descubrí que es provocado por centenas de monjas muertas, todas apiladas cual montaña de mierda.