Hola, volví, porque si hay algo que jamás voy a dejar de hacer es ventilar en este bello blog que muy pocas personas leen hoy en día. Sé que siempre pasa mucho tiempo entre post y post pero esta vez fuera de lo monotemático de siempre tengo mucho para contar ya que en mi cabecita están sucediendo COSAS. Eso, cosas.
En estos últimos meses se fueron llevando a cabo muchos cambios en mi vida, principalmente el hecho de que me estoy yendo a vivir a otro país con mi novio, SÍ, como leyeron. Aunque estoy inmensamente feliz con todo ese giro que estoy haciendo y que hace años tengo en mente no puedo evitar tener bocha de pensamientos medio del orto a veces. Soy consciente de que tiendo a ser un poco negativa, pero a mí me gusta decir que soy sólo precavida.
Soy de esas personas que frente un avance o una buena noticia automáticamente piensa también en las cosas que pueden salir mal o que pueden complicar la situación en general. Nunca me pareció algo tan descabellado, pero me estoy dando cuenta que el común denominador sólo se queda en la buena noticia y no ve más allá. Prefiero estar precavida, ese es mi dicho del mal, saber que pueden pasar esas cosas y que no me tomen de sorpresa, siempre tratando de que esos pensamientos no sobrepasen la buena noticia, al buen augurio en sí.
Otra cosa que creo que me juega en contra (Relacionado con lo anterior) es que organizo absolutamente todo, me gusta saber dónde se hace algún trámite en particular, me gusta saber de opiniones y recomendaciones de personas que ya hayan pasado por la misma situación, busco referencias, todo. El problema es que me altero mucho a veces cuando siento que no encuentro soluciones o si siento que estoy un poco a la deriva, no me gusta dejar temas importantes al azar o postergarlos hasta que estoy hasta las manos.
El problema es que a veces hay cambios en el camino que si bien me adapto y no entro en pánico sí tengo que admitir que me alteran bastante y termino poniéndome nerviosa, con dolor de estómago y esos males que me agarran cuando estoy mal.
En fin, sacando todos esos pensamientos y sensaciones medio chotas que me agarran de vez en cuando respecto al viaje, la verdad es que estoy con una ansiedad divina y con muchas ganas de transitar todo lo que se me viene, voy a un país mágico y tener el apoyo de Juan es una de las cosas más lindas que me pudieron haber sucedido.
Para lxs que no sabían nada de esto, me voy el 28 de Febrero. Todo ese mes voy a estar libre sin trabajar así que tengo tiempo como para poder juntarme e irme despidiendo. Sé que suena un tanto dramático pero lxs espero a todos en el viejo Continente.
Con bocha de amor, Nicole♥